En español es muy frecuente ver el uso del subjuntivo como sustituto del condicional en la explicación o el consecuente de las oraciones condicionales. Esto desvirtúa la figura del modo condicional, y limita los usos legítimos que podemos darle.
Por ejemplo, la siguiente expresión usa un subjuntivo en vez de un condicional:
No lo *hubiera hecho de haber conocido las consecuencias
El texto anterior queda así escrito con el modo condicional:
No lo habría hecho de haber conocido las consecuencias.
Es evidente la necesidad del condicional si escribimos la oración de la siguiente forma canónica:
Si hubiera conocido las consecuencias, no lo habría hecho.
El conocer las consecuencias marca el antecedente y va en subjuntivo. El no haber hecho algo es el consecuente y va en condicional.
A veces no está presente la condición o antecedente:
*Pudiera ser verdad lo que dices.
Basta indicar el antecedente para apreciar la necesidad del condicional:
Si no fuera porque siempre cuentas mentiras, podría ser verdad lo que dices.
Por supuesto, lo siguiente es irregularísimo y abrumadoramente feo:
Si *llovería, el suelo *estuviera mojado.
El condicional no indica condición, sino lo que es condicionado, la consecuencia.
El subjuntivo indica la condición, el antecedente.